Diferencias entre Deporte y Espectáculo Deportivo (2)
Y esta es la grandísima y enorme trasformación que ha sucedido en el mundo deportivo en los últimos 60 años. Ya que antes, lo primero que había que tener para llegar a pensar en participar en una olimpiada, era tener un gran físico, que tenía que venir acompañado de otras buenas condiciones, tanto físicas como psíquicas y una mente limpia y ordenada que fuera totalmente positiva. Porque ha habido unos atletas con unos físicos y unas condiciones excelentes, que no lo han conseguido, porque les faltaban las otras condiciones que normalmente son tanto o más importantes que el físico. Y es precisamente la falta de esas cualidades las que normalmente se solucionaban de manera personal o con el entrenador si se podía. Pues hay que reconocer que era difícil acertar para resolverlo, pero jamás se vio en las pistas de atletismo, ningún médico ni psicólogo, fisioterapeuta, nutricionista y mucho menos representante de atletas, a no ser entre el público como espectadores. Pero el deseo ambicioso por parte del atleta por querer triunfar más rápidamente y subir más alto, ha permitido que todos estos asesores o profesionales del ramo correspondiente se fueran introduciendo de una manera sencilla y siempre ofreciendo una ayuda más o menos interesante para ambas partes, pues siempre cobraban su trabajo de manera compensatoria. Hasta que poco a poco fueron dándose cuenta de que si ellos hacían funciones que resultaban buenas para los atletas, podrían ser cada vez más necesarios para mantener los espectáculos deportivos. Y si conjuntaban los servicios que todos ellos podrían proporcionar individualmente a cada atleta, éste podría cumplir con los objetivos necesarios, que eran seguir ganando en las olimpiadas y campeonatos que fueran necesarios, tanto de manera individual, como colectiva por equipos y habían conseguido pasar de ser unos simples comparsas, a ser imprescindibles para las organizaciones de espectáculos deportivos, pues de ellos dependían los resultados de los deportistas. Y de esta manera tan fácil y sencilla, han logrado romper el orden establecido durante muchos años, para construir un campeón olímpico, que lo primero que era necesario, que es como siempre tiene que ser, era la “materia prima”, o sea el atleta, para que luego con la ayuda del entrenador, pudieran sacar todo el capital deportivo que tenía el atleta en su interior y según lo hicieran bien el uno junto con el otro, obtendrían los mejores resultados posibles. Siendo el entrenador el único que sufría algún cambio, ya que el primero que era el que le descubría, seria normalmente sustituido, por otro más experto y formado al más alto nivel en los diversos entrenamientos que necesitara cada atleta.
Pero ahora, como ya he dicho, los tiempos han cambiado y es un equipo de personas a nivel individual o por equipos, que reúnen todos sus conocimientos personales, con la idea de que según vayan pasando por sus manos profesionales, unos cuantos más o menos deportistas, que estén dispuestos a aceptar todo lo que tengan que aceptar, para conseguir sus propósitos. Y una vez conocidos y aceptados todos los principios básicos necesarios, se dedican a trabajar con él, a todo lo que aguante el atleta, pero para alguno que los aguanta, son muchos más los que abandonan. Que si sumamos todos los que inician ese largo recorrido, cada año en el mundo entero, desde los más tiernos años de su juventud, son millones los que querrían dedicarse al deporte en general de manera exclusiva, porque les atrae enormemente la “zanahoria del dinero” y aguantan hasta que no pueden más o sencillamente les dejan de lado, porque después de dedicarle mucho tiempo intentándolo, a los que dirigen todos estos asuntos deportivos, no les interesan y quieren que sus plazas sean utilizadas por nuevos deportistas, que empiecen de nuevo con las mismas ideas y ganas que los anteriores, que después de intentarlo, no han podido seguir y han sido apartados sin tener ninguna consideración con ellos. Y a partir de entonces todos ellos, que era cuando realmente tendrían que empezar a vivir su vida, entran en un terreno personal muy peligroso para su salud, que si no tienen alguna persona cercana a ellos, que les ayude a superar el miedo y la desconfianza en todo y por todo, o sea, a la edad entre los 16 y 21 años, al ser apartados de esa vida para la que se había estado preparando durante bastantes años con toda la ilusión del mundo. Directamente le conduce a una inseguridad sobre sí mismo muy acusada, lo que le produce inestabilidad, ansiedad, depresión, etc., pues han entregado todo y no han recibido nada. O sea que el que creía que iba a meterse de lleno en el terreno de la salud, por la leyenda de la salud del deportista, acaba totalmente introducido de lleno en el terreno de la enfermedad. Y esto le sucede a una cantidad enorme de jóvenes de todo el mundo, que han caído en una trampa que les han puesto delante de las narices, pues nunca han dejado de recibir promesas más o menos interesantes, pero sin ninguna realidad verdadera.
¿Pero como no van a aceptar todas esas duras condiciones a las que tienen que someterse, todos los que se sienten ganadores, si quieren poder ascender a lo más alto del pódium olímpico?. Pues aunque tienen unos años muy duros de entrenamiento y otras cosas que conllevan los entrenamientos, sin las cuales no sería posible hacerlos. Este es el problema que pasa factura más adelante, porque han forzado el cuerpo para realizar unos entrenamientos muy fuertes y sin apenas recuperación y los resultados inmediatos son fenomenales, pero unos años después esos grandes esfuerzos a los que han sometido a su organismo, gracias a la ayuda, que les ha permitido una rápida recuperación física, entre los entrenamientos, que normalmente son 2 o 3 veces al día, para poder seguir entrenando de una manera mucho más continua y durante mucho más tiempo de lo normal. Su propio organismo, por los malos y perversos abusos a que le han sometido le pasa factura y la tienen que pagar irremediablemente, quiera o no quiera, pues el daño está causado y es muy difícil su reparación. Pero éstos tienen una cosa buena para que nos sirva de ejemplo, que no tienen los anteriores aunque sean muchísimos más. Pues seguir el paso de los grandes campeones es mucho más fácil porque son muchísimos menos y aunque muchos ya están en plena decadencia, todavía pueden servir como reclamo publicitario para las grandes cantidades de masas humanas, para las que durante muchos años han sido sus ídolos. Y tanto a la masa humana que los ha tenido, como los grandes protagonistas de su tiempo, como a los propios protagonistas de esa enorme masa humana, les resulta bastante difícil aceptar el error que han cometido, tanto los unos como los otros. Unos aceptándole por lo que no era y los otros intentando mantener el engaño de lo que habían conseguido, de una manera no totalmente legal.
Pero es que además estas marcas atléticas actuales, tampoco tienen tanta diferencia con los records de los años 1960, como se puede comprobar perfectamente en los ranquin que existen tanto de aquellos tiempos como de los de ahora. Y ésta información que es verdadera, es ocultada normalmente por los locutores o periodistas de los distintos medios de comunicación, que todos ellos además están aconsejados por distintos atletas retirados, que alguna vez, aunque fuera de vez en cuando, podrían decir alguna de estas cosas que yo estoy comentando, para que el público en general, que no está bien informado, tuvieran una información real y verdadera de cómo eran las marcas deportivas anteriores, para poder contrastar ambas informaciones y otras cosas que sería muy interesante que conocieran para poder comparar lo conseguido de una manera o de otra. Como por ejemplo: que hoy en día solamente con las cosas que hoy se utilizan, que antes no se conocían para su uso deportivo, nosotros hubiéramos llegado a conseguir muchas mejores marcas con unos entrenamientos muchísimo más suave, ya que el organismo humano, aunque quisiéramos hacerlo, no nos lo hubiera permitido. Pues hubieran abundado enormemente las lesiones y lo que nosotros queríamos por encima de todo, era competir que era lo que nos gustaba, además sabíamos perfectamente que solamente el verdadero campeón era el que podía excederse un poco más en los entrenamientos, porque él era el campeón y se lo permitía con cierta alegría. Y el campeón lo tenía muy claro y los que no eran campeones también. Y esas frases falsas y totalmente vacías y sin sentido, como (hay que hacer posible lo imposible, o todo es posible hasta lo imposible), que en estos tiempos actuales se tienen como totalmente aceptables y muy positivas para incitarles a la lucha, en los años anteriores hubieran sido totalmente absurdas y desequilibradas y por eso, ni siquiera existían. Pues para hacer posible lo imposible, tendría que haber existido la posibilidad que antes no existía, de haber hecho lo que entonces era imposible, como por ejemplo en los entrenamientos de un corredor, poder hacer en lugar de las diez series de mil metros en un tiempo fuerte y con una recuperación de tres o cuatro minutos, que era lo que se hacía entonces ¿Qué hubiéramos podido hacer si hubiéramos hecho lo que se hace ahora? Pues, por ejemplo ahora en los entrenamientos, llegan a hacer veinte series de mil metros a un ritmo mucho más rápido y con 50 o 60 segundos de recuperación. Y el que haga este tiempo en los entrenamientos, durante tres o cuatro años, se asegura con esas marcas el poder competir en la alta competición, lo cual era totalmente imposible en los años 60. Pues lo máximo que yo vi en aquella época fue hacer 20 series de 100 metros, recuperando en la vuelta. Este era un nuevo sistema alemán, que era de lo más fuerte en aquel tiempo. Y en el sector de los lanzamientos, donde se encuentran los lanzadores que con mucha facilidad, manejan para hacer el pectoral y las piernas entre 200 y 300 Kgs. muy fácilmente. Que solamente de pensarlo me da un telele, porque nosotros en nuestra época apenas hacíamos levantamiento de pesas, ni nada por el estilo. Pues por ejemplo, en mí, todo era buscar velocidad, elasticidad y algo de fuerza con la idea de buscar fundamentalmente la potencia. Y ahora, sin embargo desde que ha cambiado el sistema de entrenamientos, lo que predomina fundamentalmente en el deporte, tanto femenino como masculino, es la fuerza al máximo la cual es bastante fácil de conseguir siempre que se utilice lo que es adecuado para conseguirla, como es la química y alguna cosilla más, que en el mundo del espectáculo deportivo, todos conocen.
Y para terminar, voy a hacerlo poniendo unos ejemplos para que cada uno interiormente los valore como a él le parezca bien. Primero: En la olimpiada de 1960 que se celebró en Roma, que es la última de la que se puede afirmar algo bueno en lo referente al Deporte-Salud, participó en la carrera de 1500 m. un australiano llamado Albert Elliot, que tenía 21 o 22 años, con un físico fenomenal y una técnica de carrera excelente, que un día del mes de agosto, a las 17 horas de un caluroso día en Roma, ´ganó los 1500 m. con un tiempo de 3m y 35 s. (en pista de ceniza y todos los inconvenientes que hoy conocemos y entonces nos parecían fenomenales). Pues según los técnicos cuando unos años después aparecieron las pistas de tartán, todos ellos coincidían que entre correr en las antiguas pistas de ceniza y las nuevas de tartán, existía como norma general, una diferencia entre la una y la otra a favor del tartán de un segundo por cada vuelta a la pista de 400 metros, total, como eran tres vueltas, tres segundos de diferencia de correr en una pista u otra, por tanto, como cosa curiosa y aparentemente real, la misma carrera en la pista de tartán se hubiera conseguido en 3m y 32 s. más o menos, marca que junto a la de los otros finalistas de la prueba son perfectamente válidas en las Olimpiadas actuales. Al poco tiempo de acabar la olimpiada salió en el periódico la noticia que Elliot abandonaba el atletismo, para irse a estudiar a una Universidad de Inglaterra. Segundo: En la carrera de 400 ms., tanto el alemán Carl Kaufmann como el americano Otis Davis, hicieron 44,50, pero es que los otros finalistas, si no me equivoco, hicieron todos ellos alrededor de 45 s. Y sigo diciendo que la pista era de ceniza y alguna otra cosa más que como todos sabemos, al compararlas con el suelo de tartán de hoy, todas aquellas marcas salen perjudicadas. Pero a pesar de todo, comprobamos que al comparar estas marcas con las marcas de hoy, no existe mucha diferencia. ¿Qué os parecen estas dos noticias que os acabo de contar? Tercero: Y para terminar quiero cerrar este punto relacionado con las marcas atléticas de antes y ahora, con un asunto que nadie que yo conozca, le dio la verdadera importancia que tenía de cara al futuro. Durante los años sesenta hasta el 1970, muchos años competimos España Francia en atletismo y en la prueba de lanzamiento de peso, siempre existió una lucha por el primer puesto entre un atleta francés, que no me acuerdo exactamente de su nombre y mi compañero Alberto Díaz de la Gándara y siempre lanzaban normalmente entre 16 y 17 metros, pero generalmente ganaba Alberto. Yo dejé la competición a finales de los sesenta y a principios de 1970, sería el 71 o 72, viendo por televisión un encuentro internacional de Francia vi a ese lanzador de peso francés lanzar alrededor de los 20 metros y desde luego puedo afirmar rotundamente que jamás ese atleta pudiera haber llegado a esa distancia de 20 metros, pues era mayor que yo y que Alberto y a esa edad y con las condiciones que tenía, haciendo los entrenamientos normales que hubiera hecho hasta entonces, sería imposible superar su marca personal en tres metros, a no ser que hiciera algo que es desconocido para mí y alguno más. Pues lo que acabo de contar es de una enorme importancia, sobre lo que iba a venir más adelante, con respecto a las marcas atléticas de antes y las de ahora. Me gustaría que fuera posible que Alberto, que hace muchísimos años que no sé nada de él, lo pudiera confirmar. Ojala que sea posible.
Y para finalizar esta ventana atlética-deportiva voy a hacer una referencia sobre lo que ha supuesto, pero sobre todo supondrá en mi vida a partir de los años venideros. Para lo cual voy a utilizar una carrera atlética, para que me sirva como comparación entre mi vida y las carreras pedestres que hoy son tan conocidas porque son utilizadas por muchísimas personas, como ejercicio diario deportivo para buscar la salud. Pues la vida de los seres humanos es una carrera atlética continuada, que hay que correrla desde el primer día hasta el último y lo que todos queremos, es que sea lo más larga posible, pues a nadie le gusta morirse. Porque morirse, en sí mismo, es un fallo del organismo humano, que paraliza su movilidad, que no estamos acostumbrados a aceptar. Y esta carrera atlética, según como la hagamos, tanto de preparación como de la predisposición en la que nos encontremos para realizarla, está sometida al estado físico y mental en el que nos vayamos encontrando a lo largo de todo su recorrido. Que no es otra cosa que disponernos para con nosotros mismos de una excelente salud, que nos conforte y fortalezca, para disfrutar con alegría la vitalidad que nos proporciona ese sincero vivir de cada día. Y para conseguir todo esto, es para lo que he decidido tener a mi disposición (la filosofía de vida, la alimentación, la formación atlética deportiva y la ilusión). Que son los cuatro apoyos con los que quiero hacer el recorrido de la carrera de mi vida, en las mejores condiciones que pueda, para con ello intentar, que sea lo más larga y duradera posible. Sin olvidarme nunca de lo que desde hace muchos años ha sido un gran impulsor en mi vida diaria para llegar a donde he llegado hasta ahora, que ha sido la carne de membrillo García-Vallano y con la que quiero seguir contando hasta el final.
Y todo esto será posible cuando comience el tercer periodo del Proyecto-Salud que estoy desarrollando desde hace mucho tiempo, como ya sabéis, del que os iré comunicando como será y en qué consistirá, lo que os servirá de referencia, sobre lo que quiero intentar y además podremos comprobar cómo se va realizando el Proyecto, si es que realmente se realiza, que todo hay que verlo. Pues a partir de entonces, voy a meterme en un terreno oscuro y lleno de tinieblas que hasta ahora nadie ha explorado. Y no tenemos que olvidar que el Proyecto-Salud que inicié hace cuarenta años se cumple en su totalidad el año que viene, dentro de cuatro meses a los 80 años de edad, lo cual si es cierto será un éxito total del que me sentiré muy contento y feliz. Y es precisamente por encontrarme en esa situación tan fenomenal en la que me encuentro, por lo que me voy a atrever a ampliar el Proyecto que acababa a los 80 años, con un tercer Periodo. Pero sabiendo perfectamente que me introduzco en un terreno totalmente desconocido para la humanidad entera y ya veremos como acaba todo esto, pero de momento me siento plenamente feliz y contento para poder hacerlo. Y según vaya transcurriendo el tercer período de la carrera total, os lo iré contando, para que también vosotros vayáis participando conmigo en ella, siempre con la idea de que alguno de vosotros, se anime a seguir la estela, que según vaya corriendo, que yo ire dejando marcada, para mi propio bien y el vuestro, os lo contaré según vaya avanzando. Hasta siempre.